Muchas empresas parten ante la adversidad de la vida y lo que sucedió en casa de Angello Gutiérrez no es la excepción. “Cuando mi padre se enfermó y pasábamos por un mal momento económico, tuvimos que hacer algo para salir adelante y empezamos a trabajar en la confección y diseño de ropa, aunque todo era muy básico”, recuerda hoy Angello, creador de Guti Gutiérrez, empresa dedicada al diseño y confección de ropa femenina y poleras para toda la familia.
Lo bueno es que estos diseños gustaron y con el uso de la redes sociales, Angello pudo dar a conocer Guti Gutiérrez. Luego vino la fluidez en el diseño, se les hizo más fácil y muy pronto agregaron variedad, colores y para lograr llamar la atención comenzaron con promociones en redes sociales, partiendo con un concurso que no tuvo mucha reacción, apenas 40 likes. Para Navidad y Año Nuevo de ese año realizaron otro concurso y el tema se disparó, “fue un éxito total para mi padre y mis hermanos”, recuerda emocionado Angello.
La demanda fue mayor y el living, el comedor y las habitaciones de la familia Gutiérrez se convirtieron en un taller lleno de telas, hilos, máquinas y también de las ganas de salir adelante con este negocio, el cual Angello conoce desde muy joven. “Aprendí a utilizar las máquinas desde los 15 años gracias a mi padre, mi gran mentor, cuando trabajé de ambulante vendiendo faldas en Costanera Center”.
En la empresa familiar todos aportan: “mi hermana Kattyan es la modelo oficial, mi padre de las compras y la agenda, yo estoy a cargo de las redes y soy el rostro visible”, explica Guti, quien sube videos mostrando la confección de algunos diseños y con eso han obtenido muy buena aceptación.
Con dos años en el mercado, la empresa ya tiene “clientas muy fieles y de todas las regiones de Chile”. Guti Gutiérrez le ha sacado el máximo provecho a las redes sociales, atendiendo todos los pedidos que sus clientes de manera virtual.
