Estados Unidos aprueba la primera vacuna preventiva contra el VIH con protección casi perfecta


Este es un paso histórico en la lucha contra el VIH. Desarrollada por Gilead Sciences, “Yeztugo” promete cambiar el paradigma de la prevención, aunque su alto costo plantea desafíos de acceso global. Activistas ya han instado a la producción de versiones genéricas en países de bajos recursos.
La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de Estados Unidos aprobó este miércoles una vacuna inyectable que puede prevenir el VIH. El tratamiento, llamado Yeztugo, representa un avance significativo en la lucha contra el VIH/Sida y consiste en dos aplicaciones al año.
Según la biofarmacéutica Gilead Sciences, Yeztugo estará disponible para adultos y adolescentes que pesen al menos 35 kilos. Este tratamiento reduce el riesgo de contraer el VIH por vía sexual. La inyección, cuyo principio activo es lenacapavir, ofrece protección durante seis meses y los ensayos clínicos de fase 3 demostraron una eficacia cercana al 100%.
Lenacapavir es un inhibidor que ayuda a reducir la carga viral en la sangre. Según Gilead, con este nuevo método ya no serían necesarios los tratamientos orales diarios.
Los ensayos clínicos realizados con mujeres y adolescentes en África subsahariana y Uganda mostraron una eficacia del 100% en la prevención. En tanto, otros estudios en Estados Unidos, Argentina, Brasil, México, Perú, Sudáfrica y Tailandia reportaron una eficacia del 96%.
Si bien existen medicamentos para prevenir la transmisión del VIH desde hace más de una década, la mayoría requiere una dosis diaria. Gilead ya comercializa desde 2022 un tratamiento antirretroviral llamado Sunlenca, desarrollado a partir de la misma molécula.
Aunque este nuevo tratamiento representa una eficacia sin precedentes, su costo ha generado preocupación: la vacuna costará 28.218 dólares según The New York Times, es decir, unos 14.000 dólares por dosis, lo que equivale a aproximadamente 26 millones de pesos chilenos.
Gilead aseguró que la mayoría de las personas no pagará el costo total gracias a la cobertura de seguros de salud en EE.UU. y programas de asistencia para pacientes. Además, la farmacéutica afirmó que será gratuita para personas de bajos ingresos.
Numerosas organizaciones y activistas han instado a Gilead a garantizar el acceso global al tratamiento, permitiendo la producción de versiones genéricas en países de bajos recursos.